“Caminante no hay camino, se hace camino al andar”

Antonio Machado

Cada uno de nosotros decidimos el curso de nuestra vida. Uno puede escoger rendirse ante lo que la vida le presenta y dejar que los golpes nos apoquen, tanto mental como físicamente, o decidir tener una vida que nos llene.

Podemos escoger hacer el cuento de nuestra vida diferente. Esto no quiere decir negar la realidad de nuestra vida. Significa cambiar nuestra visión, y cambiar nuestro enfoque para así cambiar nuestra actitud. ¿Por qué? Porque al cambiar el enfoque, vemos las cosas de otra forma, cambiamos nuestro switch mental, así vemos diferentes posibilidades, diferentes alternativas.

¿Cómo así? El camino que nos hacemos en la vida depende enteramente de nosotros. Ante un diagnóstico de una enfermedad crónica debemos, en vez de pensar en el porqué yo y lamentarnos de lo que no podemos hacer, enfocarnos en qué y cómo podemos alcanzar nuestras metas, redefinir nuestros objetivos y pensar en como mantenernos en el mejor estado posible.

Sí, no quedar escondidos del mundo, acurrucados en nuestras camas y esperando que todo mejore solo. Tenemos que enfocarnos en lo que podemos hacer, no en lo que no podemos. Esto puede y debe ser nuestro objetivo. Pensar en nuestra situación como un punto de partida, no el final de todo.

Lo digo porque yo viví muchos años viviendo peleada con mi realidad, fumando, tomando, durmiendo poco, comía mal, y en general no me cuidaba. Pero mi cuerpo me reclamaba, siempre me la cobraba, pues tenía una recaída de EM, de mayor o menor nivel, y durando más o menos días, pero estaba forzada a mantenerme en casa y recibir un régimen de esteroides para así mismo superar el episodio. En gran parte, estos ataques, atajados a tiempo, no me dejaron obvias secuelas. Solo con el tiempo y después de otras recaídas más fuertes fueron más notorios, y me afectan mi calidad de vida.

En retrospectiva, si pudiera cambiar cómo me cuidaba mi salud, lo haría. Pero ahora tengo más conocimiento que antes. Y mirar el pasado con nueva información no ayuda, debemos hacer lo que podamos para ayudarnos. ¿Tenemos un plan para ayudarnos con nuestra enfermedad? ¿Tenemos 1 o más profesionales médicos en quien confiamos? ¿Si no, que esperamos? Tenemos que informarnos, cuestionar, buscar alternativas, y mantenernos fuertes, tanto mental como físicamente.

Tenemos que informarnos bien sobre nuestra situación, acudir a fuentes de información confiable, informarnos, cuestionar, buscar alternativas, y mantenernos fuertes, tanto mental como físicamente. Piensen y actúen sobre lo que comparto, y los invito a compartir el camino conmigo. ¡Espero les haya gustado e informado mi blog, inscríbanse y espero sus comentarios!